Annaïck Locqueneux: “España no puede permitirse que sus agricultores dejen sus olivos”

El Diario Rural: Acabamos de ver manifestaciones de todo el sector del olivar por la falta de precios justos. ¿Qué está detrás de estas protestas?

Annaïck Locqueneux: A pesar de que España es la principal productora de aceite de oliva a nivel mundial, cuenta con los precios en origen más bajos de la Unión Europea, llegando incluso a situarse por debajo de los costes de producción (el coste medio ponderado de producción de aceite de oliva en España, según el Consejo Oleícola Internacional, se estableció ya en 2015 en 2,75 euros por kilo de aceite de media).

El sector olivarero, denuncia la «crítica» situación que atraviesan más 250.000 familias de productores por las pérdidas que soportan ante los bajos precios en origen del aceite de oliva y ante la propuesta del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer aranceles del 25% a varios productos agrícolas comunitarios, entre ellos el aceite de oliva.

Por otra parte, la falta de medios materiales y humanos impide llevar a cabo los controles necesarios en materia de trazabilidad, que permitan garantizar la calidad y la pureza, impidan prácticas fraudulentas relacionadas con las mezclas de aceite y certifiquen que el etiquetado ofrece una información completa y rigurosa.

EDR: ¿Cómo puede contribuir una iniciativa como ‘¿Quién es el jefe?’ a lograr precios justos para el aceite?

A. L.: Los consumidores tenemos una gran capacidad de influencia, sobre todo si nos organizamos. Cuando compramos, en cierto modo decidimos, por eso, a través de esta iniciativa podemos decidir dónde queremos que vaya nuestro dinero y ofrecer a los agricultores una remuneración constante justa, logrando así una estabilidad en la producción, que les permita verdaderamente vivir de su trabajo y transmitir su realidad a la sociedad.

EDR: ¿La experiencia acumulada con la leche puede servir para el aceite? Son sectores con estructuras productivas muy diferentes…

A. L.: Efectivamente son estructuras diferentes y nosotros adaptamos cada cuestionario a las singularidades de su sector.

En el caso del aceite, como hemos hecho con la leche y los huevos, nos hemos reunido con cada uno de los actores e identificado sus limitaciones, conocimientos y áreas de mejora específicas. Luego, hemos identificado y propuesto a nuestra comunidad de consumidores los criterios sobre los que cada uno puede actuar conociendo, en tiempo real, el impacto de su elección sobre el precio final. Además, ofrecemos información adicional para que cada uno pueda elegir y decidir libremente lo que le parezca correcto y justo.

EDR: El aceite es un producto sobre el que los consumidores tienen una gran sensibilidad a su precio. Si el aceite sube de precio, el consumo se resiente. ¿Cómo aunar entonces precio justo a los agricultores y asequible para los consumidores?

A. L.: Cuando votamos el cuestionario del aceite, podemos conocer el impacto económico de cada una de nuestras decisiones y decidir dónde queremos que vaya nuestro dinero. De esta forma, tenemos más información sobre el proceso de producción de un producto y podemos valorar opciones que no priman exclusivamente el precio final del producto. Cuando voy a un supermercado y veo dos productos iguales, el factor de decisión puede ser el precio más bajo pero si sé quién está detrás de un producto, cómo se ha producido y dónde va exactamente mi dinero, mi decisión de compra ya no dependerá del precio.

EDR: El olivar es un sector que afronta grandes presiones de nuevas prácticas productivas -muchos dicen además que dañinas para el medio ambiente- como es el superintensivo. ¿Qué valoración hacen de estas prácticas?

A. L.: El cuestionario del aceite incluye el criterio “Sistema de cultivo” y nos ofrece a los consumidores información objetiva sobre los distintos sistemas que existen en nuestro país para que cada uno valore libremente cuál es la opción que prefiere.

EDR: El sector suele mirar a mercados exteriores para aumentar sus ventas, sin embargo el consumo de aceite en España también ha caído en los últimos años. ¿Qué previsiones manejan sobre este tema? ¿Creen que es posible que el consumidor español consuma más aceite de oliva?

A. L.: No sabemos si el consumidor español va a consumir más aceite de oliva, pero nos encantaría que lo hiciera y depende de TODOS nosotros hacerlo. A través de esta iniciativa tenemos la oportunidad de crear el aceite de oliva que queremos consumir y puede ser un primer paso 🙂 porque ¿cómo puede permitirse España, primer productor mundial de aceite, que sus agricultores dejen el campo y sus olivos porque no pueden vivir dignamente de su trabajo?

El cuestionario online para opinar sobre qué aceite quieres como consumidor está abierto aquí: https://lamarcadelosconsumidores.es/productos/el-aceite-de-oliva/